
San Francisco de Macorís. – El señor Alejo de Jesús de Jesús Ramos, propietario de un vehículo Ford Escape, se presentó este martes ante la Alcaldía de San Francisco de Macorís, luego de que la institución le otorgara un plazo de 48 horas para acudir voluntariamente tras ser grabado retirando un candado de seguridad colocado por estacionarse de forma indebida en una calle céntrica.
El alcalde Alex Díaz Paulino confirmó que el sistema de GPS incorporado en el candado permitió ubicar al infractor, residente en el municipio de Cotuí. “El hecho de presentarse demuestra voluntad de colaborar; sin embargo, se trata de una infracción agravante que debe tener consecuencias. Nuestro objetivo no es crear conflictos, sino garantizar el orden y la disciplina ciudadana”, afirmó.
Durante el encuentro en el despacho municipal, De Jesús Ramos reconoció su falta y explicó que atravesaba dificultades económicas, lo que lo llevó a actuar de manera impulsiva.
“Pido disculpas, fue un error. Me arrepiento porque nadie quiere cometer un error”, expresó, al tiempo que explicó que dejó el candado en manos de comerciantes cercanos al lugar de los hechos.
Explicó que atraviesa por dificultades económicas, señalando que apenas contaba con 300 pesos el día del incidente, tenía poco combustible para su vehículo y enfrenta deudas, incluyendo dos meses de atraso en el pago de la renta de su vivienda. También manifestó que su trabajo como pintor de cuadros para galerías se ha visto afectado por la baja demanda, lo que le impide cubrir de inmediato la multa correspondiente.
El alcalde destacó que el respeto a las normas de tránsito es indispensable para mantener el orden en la ciudad y advirtió que la Ley de Ordenamiento Territorial contempla sanciones que pueden ascender hasta 50 salarios mínimos del sector público (unos RD$750,000) en casos graves, aunque indicó que se considerará la colaboración del señor.
El alcalde Alex Díaz Paulino confirmó que el sistema de GPS incorporado en el candado permitió ubicar al infractor. “El hecho de presentarse demuestra voluntad de colaborar; sin embargo, se trata de una infracción agravante que debe tener consecuencias. Nuestro objetivo no es crear conflictos, sino garantizar el orden y la disciplina ciudadana”, afirmó.
“Vamos a comprender su situación humana, pero hay que hacer respetar la ley; los candados no son decorativos, son herramientas de orden y tienen trazabilidad”, agregó Díaz Paulino.
El caso llamó la atención pública no solo por el uso del GPS en el dispositivo, sino también por el mensaje de las autoridades a favor del respeto al ordenamiento vial y el compromiso de mantener una ciudad organizada. La Alcaldía reiteró que las sanciones buscan prevenir incidentes similares y garan